Noruega convierte la lluvia en un reclamo turístico

¿Qué hacer en un lugar en el que no para de llover? ¿Salir de allí rápidamente? ¿Huir al sur? La respuesta es un rotundo ‘no’. Una agencia noruega de marketing ha convertido las interminables precipitaciones de Bergen en todo un reclamo publicitario para la segunda ciudad del país.

Del 29 de octubre de 2006 al 21 de enero de 2007 los habitantes de Bergen vivieron bajo una lluvia incesante. No dejó de caer agua ni una sola jornada… ¡En 85 días! Se trata del récord de precipitaciones en la ciudad noruega desde que existen registros, pero no es algo extraño. Debido a su peculiar orografía, Bergen es uno de los puntos más húmedos de todo el continente europeo, por eso se la conoce comúnmente como «la ciudad de la lluvia». A pesar de la belleza del enclave geográfico que la convierte en la puerta al mundo de los fiordos y de una intensa vida cultural, lo cierto es que, en principio, no resulta muy atractivo visitar un lugar caracterizado por sus interminables días de lluvia… Hasta que llegó MK Norway.

El pasado otoño de 2014, esta agencia publicitaria de Bergen fundada en 1969 decidió expandir la imagen de su trabajo y su ciudad hacia el sur abriendo una oficina en Oslo. Para difundir su llegada entre los agentes culturales, políticos y mediáticos de la capital del país, MK Norway creó una acción sin precedentes en el mundo nórdico del marketing llamada ‘Rain is Coming’. El objetivo era hacer de algo tan identificativo de Bergen y con tantas connotaciones negativas (como es la lluvia) el mayor reclamo positivo posible. ¿Cómo?

Los creativos de MK Norway idearon una campaña de comunicación poniendo todo el énfasis en algo que habitualmente suele pasar desapercibido a la hora de difundir un evento: la invitación física al mismo. Más allá de simples tarjetas o correos electrónicos, la agencia de publicidad envió a los invitados una cajita que contenía una pieza de papel blanco, una pequeña esponja en forma de nube con agua en el interior y unas instrucciones. Al apretar la nube sobre el papel, las gotas de agua derramadas dejaban a la vista en el papel el texto con la invitación al evento.

De esta forma MK Norway trató de hacer llegar a los medios de comunicación de Oslo un concentrado del mayor tormento y a la vez el mayor encanto de Bergen: la lluvia. La convocatoria fue todo un éxito y la agencia noruega de marketing consiguió su objetivo: mostrar que el agua no solo encharca calles y parques convirtiéndolos en lugares incómodos si no que se trata de algo paralelo a la creatividad, que también inunda todos y cada uno de los rincones de Bergen y a cada uno de sus habitantes. Aquí tienes un resumen de todo el proceso «marquetero» en poco más de un minuto:

¿Qué otras ideas se te ocurren para convertir algo aparentemente negativo en todo un reclamo publicitario atractivo?